Todo cuanto sembrares, lo mismo cosechareis. Haz siempre lo correcto, lo honesto, ayuda, da, brinda, Bendice y apoya a quienes lo necesitan y las gratificaciones serán infinitas.
Dice una promesa Bíblica que hasta un vaso de agua que le des a un hijo de Dios, será compensado. Aun así cuando des, hazlo de corazon, no por obligación y sin esperar, porque la recompensa será aun mayor.
"Las necesidades no terminan, más las soluciones tampoco. Siempre habrá una salida, un camino para cada caso, por más peculiar o didicil que sea, siempre, siempre ganar una salida".
Reciban Bendiciones que sobre abunden.
** Escrito por Jany Marte
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